vista del caudal del rxo santa eulalia en el distrito de chosicax en la ciudad de lima xperx. efe.jpg 1718483347EFE.- La mayoría de las víctimas están en las regiones norteñas de Piura, Lambayeque, La Libertad y Áncash.

El coordinador técnico del Estudio Nacional del Fenómeno El Niño (Enfen) y director de Oceanografía y Cambio Climático del Instituto del Mar del Perú (Imarpe), Dimitri Gutiérrez, afirmó el pasado miércoles que las lluvias y masas de lodo (huaicos) continuarán perjudicando el norte del país desde Tumbes a La Libertad al menos por dos o tres semanas más, es decir, hasta que los vientos propios del verano enfríen el mar.

Durante este tiempo las víctimas y los desastres materiales aumentan significativamente en diferentes zonas de la nación.

Los últimos reportes indican que los fallecidos ascienden a 79, mientras que 665.313 personas se encuentran damnificadas y 20 desaparecidas, 145.821 casas dañadas, así como 21.435 hectáreas de cultivo afectadas y 670 kilómetros de canales de riego destruidos, según el Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci).

La mayoría de los muertos se encuentran en La Libertad (13), Arequipa (12), Ayacucho y Cusco (9), Huancavelica, Piura y Lima (6), Cajamarca (5), Áncash y Lambayeque (3), Junín (2) y Huánuco, Moquegua, Pasco, Puno, San Martín y Tacna (1).

Igualmente, las autoridades han informado que 11.519 viviendas colapsaron, 12.440 están inhabitables y 141,149 resultaron dañadas. De igual modo, 27 colegios están destruidos, 62 no se pueden utilizar y 1.194 se encuentran afectados.

El sector transporte sufre severos daños y varios tramos de vías en todo el país mantienen el paso bloqueado o restringido.

Siguen las víctimas y afectados

En las últimas horas fueron encontrados los cuerpos de dos ancianos en los sectores de Tomeque y Chuyus, se trata de Elisa Ilán Huerta (80) y Moisés Chuys León (65), cuyos cadáveres fueron rescatados en el interior de sus viviendas, tapiada por la avalancha de lodo y piedras.

También en la carretera Sullana-Tambo Grande, producto de la fuerte corriente de las aguas de la quebrada Cieneguillo, un camión se volcó. Por fortuna, tanto el conductor del camión como su acompañante lograron salir del vehículo y fueron auxiliados por un grupo de voluntarios.