CNNMéxico.- El Estado mexicano ofreció este viernes una disculpa pública a dos militares que fueron cesados de sus cargos por ser portadores del Virus de la Inmunodeficiencia Humana (VIH).La disculpa, realizada en el Museo Memoria y Tolerancia de la Ciudad de México, fue en cumplimiento a una solicitud de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), que encontró responsable al Estado mexicano de discriminar a dos integrantes de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), identificados por las autoridades federales con las iniciales M.G.S. y J.S.C.H.
Los soldados fueron dados de baja del Ejército por ser considerados inútiles para prestar el servicio de las armas, informó a través de su cuenta de Twitter Litiga, Organización de Litigio Estratégico de Derechos Humanos, que llevó el caso de los militares.
El evento de este viernes estuvo encabezado por el secretario de Gobernación (Segob) Miguel Ángel Osorio Chong, quien dijo que en seguimiento de las recomendaciones de la CIDH se tomaron varias acciones para reivindicar la discriminación.
“El país tiene retos en materia de derechos humanos que enfrenta con la cara en alto y con transparencia”, manifestó Osorio Chong, al recordar que a “todos corresponde crear un país de derechos”.
Osorio Chong explicó que la disculpa pública forma parte de la reparación integral a los militares que fueron discriminados y ésta, incluyó apoyo médico, psicológico e indemnizaciones, así como la restitución.
El titular de Gobernación reconoció el empeño de los peticionarios, sus familiares y representantes.
"Su tenacidad es parte ya de los esfuerzos que como sociedad estamos llevando a cabo para construir un México de derechos, esfuerzo diario al que se suman las organizaciones de la sociedad civil en un ejercicio por ampliar la pluralidad, el diálogo y las libertades”, expresó el encargado de la política interna mexicana.
Una historia que comenzó hace 17 años
La abogada Graciela Rodríguez Manso, integrante de Litiga y representante de los quejosos, explicó que esa historia empezó hace 12 y 17 años.
Desde entonces, a dichas personas se les negaron sus derechos al trabajo, salud, seguridad social, honra, respeto y dignidad, y por eso la disculpa pública es importante, pues debe incluir el compromiso de no repetición.
Aunque entre el público estuvo el general José Carlos Beltrán, director de Derechos Humanos de la Sedena, la abogada enfatizó la ausencia de integrantes del Ejército en el presidium.
Previamente, el subsecretario de Derechos Humanos de Gobernación, Roberto Campa, emitió un mensaje con la disculpa del Estado mexicano propiamente dicha, en la que enfatizó que éstas enaltecen a quienes las ofrecen y a quienes las aceptan.
Se trata, dijo, "de un gesto que abona a la reconciliación necesaria en el México de hoy".