La falta de acuerdo que persiste hoy en el congreso estadounidense sobre el financiamiento al Departamento de Seguridad Interior (DHS), puede provocar el cierre de esa agencia, que se quedaría sin fondos el 27 de febrero próximo.Washington, (Prensa Latina).- El secretario del DHS, Jeh Johnson, advirtió que en caso de que la entidad que dirige carezca de presupuesto, habrá "una interrupción terrible", mientras la Casa Blanca acusa a los congresistas republicanos de poner en riesgo la seguridad nacional del país.
Los demócratas en el Senado bloquearon ayer por tercer día consecutivo un proyecto de financiamiento de los republicanos para esa agencia federal, porque incluye enmiendas que socavan las acciones del presidente Barack Obama en inmigración, que beneficiarían a unos cinco millones de indocumentados.
La iniciativa rechazada por el partido azul prevé otorgar dinero a las dependencias de esa cartera -cuyos fondos expiran este mes- hasta el fin del presente año fiscal, pero excluye asignaciones para los alivios implementados por Obama para los inmigrantes.
En caso de que no exista un acuerdo entre la Casa Blanca y el liderazgo republicano en el parlamento, cerca de 200 mil empleados -de un total de 230 mil que trabajan en el DHS- tendrían que continuar en sus puestos de trabajo, pero sin percibir salarios.
Estos considerados imprescindibles incluyen 40 mil funcionarios de las patrullas fronterizas y aduanas, 13 mil de inmigración, 40 mil del Servicio de Guardacostas y más de cuatro mil del Servicio Secreto, entre otros, que recibirían posteriormente su sueldo con carácter retroactivo, cuando exista un acuerdo sobre el tema.
El resto de los empleados, unos 30 mil, principalmente en puestos administrativos, recibiría una licencia obligatoria exenta de pago, lo que implicaría un cese de las labores de mando, control y coordinación de actividades vitales para la seguridad nacional de Estados Unidos.
En lo que el diario The Hill considera una ironía, si llega el plazo de vencimiento de los fondos del DHS el 27 de febrero sin un acuerdo entre las partes involucradas, los programas de inmigración de Obama no se afectarían porque las entidades encargadas de implementarlos se autofinancian a través de los pagos que hacen quienes reciben sus servicios.
