Las autoridades de la provincia de Aurora, en el norte de Filipinas, se preparaban para evacuar a miles de residentes el viernes y solicitaron a los turistas que vuelvan a sus casas o se refugien antes de que un tifón impacte áreas costeras del noreste del país en algún momento del fin de semana de Pascuas.

El tifón Maysak estaba perdiendo fuerza mientras se acercaba a Aurora, pero aún se esperaba que trajera fuertes vientos y lluvias cuando cruce zonas del norte de la isla Luzon el domingo, informó la oficina meteorológica.

Unos 10.000 turistas extranjeros y filipinos han viajado a la Bahía Baler, en Aurora, un destino popular para surfistas, desde el inicio del feriado el jueves, dijeron funcionarios.

El pueblo de Baler, a unos 150 kilómetros al noreste de la capital, Manila, tiene una población de unas 36.000 personas.

"Mañana impondremos una evacuación preventiva para escapar del tifón", dijo Elson Egargue, ingeniero jefe del consejo de desastres de Aurora. Agregó que más de 50 escuelas y gimnasios en la ciudad estaban listos para recibir personas desplazadas.

La población de Baler será advertida de que no nade después del viernes por la tarde y ya se ha impedido a barcos de pesca salir al mar, dijo Egargue en una entrevista radial.

Los dueños de centros turísticos en Baler advirtieron a sus huéspedes sobre la tormenta que se aproxima y algunos turistas planeaban dejar antes las playas, dijeron reportes de radios.

Maysak comenzó la semana como un tifón de categoría 5, pero se ha debilitado a categoría 2 con vientos de hasta 185 kilómetros por hora, informó la oficina meteorológica.