obamaWashington, EEUU.- (El Mundo España) El presidente de EEUU, Barack Obama, acaba de confirmar en rueda de prensa en la Casa Blanca que sus tropas continuarán en Afganistán luchando contra los talibán y contra Al Qaeda. Además, ha añadido que esta misión es vital para los intereses de seguridad de EEUU.

Obama también ha dicho que no va a permitir que Afganistán sea un "refugio de terroristas", según ha difundido France-Presse.

Además, ha anunciado un nuevo plan para mantener a 5.500 soldados estadounidenses en Afganistán más allá de 2016 y que las fuerzas de su país seguirán entrenando a las fuerzas afganas.

Esto no quiere decir que se trate de "una guerra sin fin", tal y como ha apuntado el mandatario.

"Las fuerzas afganas no son todavía tan fuertes como deberían", ha añadido.

"Esto es lo correcto", ha dicho el presidente de EEUU al comunicar su decisión, y que la situación todavía es "muy frágil" en las áreas claves de Afganistán.

También ha apuntado, según Reuters, que urge que todas partes en la región empujen a los talibán a retornar a los diálogos de paz.

Previamente a la comparecencia del presidente de EEUU, hoy se daba a conocer en el diario 'The New York Times' el aplazamiento de la retirada de tropas y el cambio de estrategia, según habían informado varios funcionarios de la Administración estadounidense.

Cambio de política

En la actualidad, la fuerza estadounidense en el país es de 9.800 soldados que permanecerán en el país la mayor parte de 2016 en virtud de los planes revisados por el Gobierno de Obama.

Algunas de las tropas continuarán en Afganistán para entrenar y asesorar a las fuerzas afganas, mientras que otra parte continuará con la búsqueda de combatientes de Al Qaeda y del Estado Islámico y otros grupos terroristas que han encontrado un refugio en Afganistán.

En un principio, Obama había previsto retirar al grueso de sus tropas del país, salvo por un pequeño destacamento que se mantendría en la embajada, a finales del próximo año, coincidiendo con el final de sus ocho años en la Casa Blanca.Obama abandona así su promesa de retirar a las tropas de Afganistán antes de terminar la legislatura.

La presión ha sido máxima.

Líderes militares argumentaron durante meses que los afganos necesitan ayuda adicional y apoyo de Estados Unidos para derrotar a los talibanes, que han resurgido en el país, y mantener los avances logrados en los últimos 14 años.

Los insurgentes se propagan por muchas más zonas que en el año 2001, según datos de la ONU, y el mes pasado los talibán obtuvieron una de sus victorias más importantes en todos estos años, al tomar la ciudad norteña de Kunduz donde ha mantenido el control hasta hace dos días.

Sin embargo, incluso antes de la toma de Kunduz, el Gobierno estadounidense se encontraba bajo una fuerte presión del Ejército y otros sectores para rechazar la idea de reducir a la mitad los efectivos destinados en Afganistán.