09360347 xlHispan TV.- La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, suspendida del cargo, ha sido llamada a declarar como testigo de la defensa de Marcelo Odebrecht, condenado por el caso de corrupción en Petrobras.

De acuerdo con el sitio brasileño G1 de Globo, la mandataria, quien este domingo cumple un mes de los 180 días que tiene que estar fuera del Ejecutivo, podrá decidir si acude a declarar ante el juez o si responde al interrogatorio por escrito.

La presidenta comparecerá como testigo en uno de los casos de corrupción en los que está implicado el empresario Odebrecht, quien informó a las autoridades que la reelección de Rousseff se financió con dinero que fue enviado desde el extranjero y que ella no había declarado a las autoridades electorales. Anteriormente había sido acusada por este caso, pero la Justicia brasileña la exculpó.

El empresario brasileño Marcelo Odebrecht, condenado por la trama de corrupción en Petrobras.

Odebrecht es acusado de formar un cártel para amañar contratos con la petrolera a través del pago de sobornos a altos jefes de Petrobras y a políticos, en un caso que tiene contra las cuerdas a buena parte de la élite política y empresarial local.

Como se recuerda, hace unos días Rousseff afirmó que el polémico jefe de los Diputados, Eduardo Cunha, también investigado por corrupción, es el personaje "central" del Gobierno del presidente interino, Michel Temer, quien deberá "arrodillarse" ante el titular de Congreso.

31 días del presidencia de Temer

El 12 de mayo, Temer, que fuera vicepresidente de Rousseff, sustituyó a la mandataria en el cargo por decisión del Senado. Desde entonces, el líder del el Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB) nunca ha salido del Palacio del Planalto advertido de que si lo hace se expondrá al repudio del público.

Una reciente encuesta muestra que solo el 28 % de los brasileños apoya su gestión y el 50,3 % demanda elecciones anticipadas como las propuestas recientemente por Rousseff, que también impulsa un plebiscito.

A diferencia de Temer, Dilma y su mentor, el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, han participado en varios actos desde el mes pasado. El viernes, el líder del Partido de los Trabajadores (PT) habló ante una importante concurrencia en el centro de San Pablo, donde no dejó de retumbar la consigna “Fuera Temer”.

Lo que sí se evidencia es que Brasil enfrenta una crisis política con miras golpistas. Medios denuncian que la mayoría de parlamentarios que han votado a favor del juicio político contra Rousseff están involucrados en casos de corrupción.