Desde el McCormick Place llamó a la unidad más allá de las diferencias y pidió invertir en los niños migrantes.

“Si no estamos dispuestos a invertir en niños migrantes, vamos a reducir las perspectivas de nuestros propios hijos, porque nuestros niños representan el futuro de la fuerza laboral de los estadounidenses”, aseguró el presidente de Estados Unidos.

Desde Chicago, admitió que el racismo sigue siendo una fuerza de división y lo condenó enérgicamente por ser una amenaza para la democracia. Destacó, justamente, la importancia de la democracia en Estados Unidos, que permitirá la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca y reiteró su compromiso de una transición pacífica.

“Le prometí al presidente electo que mi administración hará una transición pacífica como lo hizo el presidente Bush para mí”, afirmó el presidente Barack Obama.

Resaltó los logros de su Gobierno como la mejora de la economía, la estabilidad del dólar y el nivel más bajo de desempleo en 10 años.

Reiteró la viabilidad de su programa de salud, conocido como Obamacare, el cual ha amenazado Trump que derogará en cuanto asuma el poder.

“Les puedo decir que ganamos más igualdad y seguridad en derechos de salud para más de 20 millones de ciudadanos”, afirmó el mandatario estadounidense.

También destacó los logros en política exterior.

“Les puedo decir que abrimos un nuevo capítulo con el pueblo cubano, hicimos un acuerdo nuclear iraní, atrapamos la mente maestra de los ataques del 11 de septiembre”, destacó el presidente Obama.

Y criticó que algunos aún piensen que el cambio climático no existe, en referencia a las declaraciones que ha hecho Donald Trump.

También reiteró su lucha contra el terrorismo y finalmente agradeció a los ciudadanos por la experiencia de haber sido comandante en jefe.

“Cada día aprendí algo nuevo con ustedes, ustedes me hicieron ser un mejor presidente y un mejor hombre”, sentenció el presidente de Estados Unidos, Barack Obama.