A partir de este día, Estados Unidos endurece el embargo contra Cuba, con la entrada en vigor del capítulo tres de la Ley Helms-Burton, que permite a ciudadanos cubano estadounidenses, cuyos bienes fueron confiscados por el gobierno cubano, presentar demandas para exigir indemnización.

La Unión Europea rechazó esta medida y anunció que recurrirá a la Organización Mundial de Comercio para impugnarla.

La primera demanda fue interpuesta por la familia García Bengochea, en un tribunal de Miami, Florida, contra la empresa Carnival Cruise por utilizar el Puerto de Santiago de Cuba.

Sus abogados sostienen que el muelle le pertenecía a esta familia, cuando fue expropiado por el gobierno cubano durante la revolución.