De acuerdo con el embajador de Rusia en México, Viktor V. Koronelli, el involucramiento de su nación en el conflicto armado sirio y sus esfuerzos “por estabilizar la situación continúan” como respuesta a la solicitud presentada por el presidente sirio, Bashar Al Asad, en septiembre de 2015 a la Cámara Alta del Parlamento ruso.
Dicha instancia legislativa, recordó en entrevista con Notimex, avaló el “uso de Fuerzas Armadas de la Federación Rusa fuera del territorio nacional para brindar apoyo a las tropas gubernamentales sirias”.
De tal suerte, además de brindar apoyo en la lucha contra el Estado Islámico, Rusia mantiene un “contacto permanente” sobre el conflicto sirio con Irán y Turquía, y respalda el llamamiento de las Naciones Unidas para “levantar las sanciones en Damasco, que bloquean suministros de medicamentos y equipos”.
Para Rusia, la solución del conflicto sirio debe pasar por el respeto a la soberanía del país. Desde su punto de vista, son los sirios, gobierno y oposición, quienes deben definir los términos de resolución del conflicto, y no ninguno de los agentes foráneos intervinientes en el mismo, como la propia Rusia, Turquía y Estados Unidos.