Nicola Sturgeon, primera ministra de Escocia, advirtió que ese país mantendrá la frase “quédate en casa”, para evitar la confusión entre los ciudadanos, mientras que el ministro de Salud de Gales, Vaughan Gething, criticó el slogan, anunciado la tarde del sábado, pues no fue consultado por el gobierno de Boris Johnson con el resto de los países conformantes de Reino Unido.

La Policía Metropolitana de la Federación se unió al llamado y aseguró que el gobierno lanza un mensaje confuso a la población, informó la BBC, mientras que algunos de los miembros del personal médico han externado que les causa preocupaciones, por la posible nueva libertad percibida por los ciudadanos.

El gobierno de Boris Johnson aclaró este domingo en redes sociales que el mensaje que llama a los ciudadanos a “mantenerse alerta” implica que las personas deberán quedarse en casa el mayor tiempo posible.

También trabajar desde sus hogares cuando lo permita sus empleos, limitar el contacto con las personas, mantener los dos metros de distancia y lavarse las manos de forma regular.

De acuerdo con los datos emitidos por parte de las autoridades, 178 personas que fueron positivas a las pruebas de COVID-19 fallecieron este domingo en Inglaterra, lo que suma un total de 23 mil 149 decesos, a los que se agregan los totales de Escocia, con mil 857 decesos desde que inició la enfermedad, 435 en Irlanda del Norte y mil 111 en Gales.

Mientras que las regiones con menores decesos y contagios podrían llegar a mantener las medidas estrictas de confinamiento Inglaterra podría pasar a una nueva fase de prevención que permita algunas nuevas acciones.

El Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte está formado por Gran Bretaña (a su vez integrado por Inglaterra, Gales y Escocia) e Irlanda del Norte.