Con el mejoramiento en la actuación y reforzamiento en personal y uso de tecnología, como el rastreo de patrullas en tiempo real, la Unidad de Asuntos Internos de la Comisión Estatal de Seguridad (CES), ha realizado acciones de atención inmediata a toda denuncia pública o privada que la ciudadanía realiza contra elementos que han incurrido en prácticas no profesionales, a fin de mantener y posicionar el cambio en la percepción social. Además, colabora con las instancias de procuración de justicia local y federal cuando se trata de apoyar investigaciones específicas por actos graves en el servicio.

A través de las estrategias de trabajo contenidas en el Plan Estatal de Desarrollo, la CES, que encabeza el Comisionado Hervé Hurtado Ruiz, inició en esta administración la reestructuración de la Unidad de Asuntos Internos que se transformará en la Inspectoría General Policial, con el propósito de profesionalizar el servicio de vigilancia y verificación de las actividades de los policías activos e incluso, de los que han dejado el servicio y que fortalecerán los programas específicos de depuración policial, así como los de estímulos y recompensas para los buenos elementos.

Las personas que integran la Unidad son elementos profesionales que cumplen con los principios de actuación policial con el único objetivo de hacer valer la Ley de Seguridad Pública del Estado de Tlaxcala y en apego al ejercicio de estrictas prácticas profesionales.

La Unidad de Asuntos Internos es la fiscalía interna en las estructuras policiacas y que somete al máximo tribunal policial, que es el Consejo de Honor y Justicia, los casos de aquellos elementos que por su mal comportamiento o en su caso, aquellos con actos de valor y entrega al servicio de la ciudadanía, requieran algún correctivo o estimulo.

Es así que, como parte del proceso de reingeniería que se lleva a cabo, la CES desconcentró la Unidad de Asuntos Internos de sus oficinas centrales a otra instalación en Ocotlán, para darles mayor privacidad y autonomía en su actuación, y, sobre todo, para prever el no caer en conflicto de interés al tener cercanía diaria con el personal policial en el mismo edificio.

Con estos procesos, la Unidad reportó haber promovido ocho sesiones del Consejo de Honor y Justicia durante estos últimos meses y que culminó en la remoción de 14 elementos de seguridad y una suspensión temporal a tres elementos más, quienes trasgredieron los principios de actuación policial, previstos en la Ley de Seguridad Pública del Estado de Tlaxcala y sus Municipios. Además, se dictó la suspensión de trabajo sin percepción salarial de tres elementos de esta institución, con lo que se da cabal cumplimiento al régimen disciplinario.

Cabe mencionar que para quien ha sido removido o cesado por un Consejo de Honor Policial, su expediente quedará a disposición al Sistema Plataforma México, a fin de que otro tipo de corporaciones policiacas puedan conocer el historial de cada ex elemento y bloquear su contratación en instancias policiales, con lo que se preserva el espíritu de los programas de depuración policial.

Así, solo se realizan procesos apegados a la ley, al descartar la realización de investigaciones en ámbitos personales que afecten el desempeño de los elementos de seguridad.

El Comisionado Hervé Hurtado mencionó también que, en próximos días, dicho Consejo de Honor sesionará para emitir la resolución de tres casos relevantes que la Unidad de Asuntos Internos investigó recientemente, a fin de estudiar y dictaminar los expedientes de investigación administrativa en contra de otros 11 elementos operativos.

“Con estas acciones apegadas a procesos legales, los ciudadanos sabrán que existe una instancia autónoma y objetiva que vigila la actuación de quienes integran el cuerpo de Seguridad Estatal y crean sinceramente que toda denuncia es investigada por mínima que sea”, finalizó el Comisionado Estatal de Seguridad.

De esta manera, el titular de la Unidad de Asuntos Internos, Andrés de Jesús Juárez Pérez, recibió indicaciones del Comisionado de la CES de continuar con el trabajo de construcción de un nuevo modelo de seguridad, cumpliendo con los estándares y bajo el esquema de cero tolerancia a la corrupción.

El Gobierno del Estado está cercano a la gente y promueve los valores de ética y buen comportamiento de sus instancias policiacas para un mejor futuro en la relación policía y sociedad.