“Nosotros nos preparamos y se pudiera decir que es una preparación física ardua pero también se requiere una preparación mental, más que física es una preparación mental el estar preparados en lo que pudiera acontecer en el transitar o andar en las montañas”
Su deseo de conquistar las alturas lo han llevado a escalar las cordilleras más altas de nuestro país.
“Comenzamos a incursionar en otras montañas el pico de Orizaba que es la montaña más alta de México con sus más 5 mil 600 metros de altura el Iztaccíhuatl, el nevado de Toluca que son montañas importantes en México”
Su próximo desafío será el Aconcagua con sus 6 mil 961 metros de altura, montaña ubicada en Argentina.