Contenido narrativo, mitológico y simbólico celebra tres décadas del IAGO en el Museo Nacional de la Estampa

0322 culturaLa muestra permanecerá hasta el 14 de julio. Se exhiben obras de Tamayo, Toledo, Takeda, Enrique Flores, Juan Alcázar, Rodolfo Morales, José Villalobos y Demián Flores, entre otros

Maestros oaxaqueños celebran 30 años del Instituto de Artes Gráficas de Oaxaca (IAGO) con la exposición del trabajo de 14 reconocidos artistas que tienen sus raíces en Oaxaca. Rufino Tamayo fue uno de los primeros artistas mexicanos que exploraron la abstracción figurativa al crear imágenes basadas en el modernismo internacional y su conocimiento del arte prehispánico.

El llamado estilo oaxaqueño es un lenguaje visual que hace referencia a las culturas locales e indígenas de la entidad, caracterizado por un nutrido significado de colores intensos y formas simplificadas, así como por su contenido narrativo, mitológico y simbólico.

Rodolfo Morales (1925-2001) basó su realismo mágico en el folclor, los mitos y los sueños. Juan Alcázar (1955-2013) trabajó también ese estilo y Enrique Flores (1963) realiza grabados poéticos con motivos del campo oaxaqueño.

Las estampas de Shinzaburo Takeda (1935), originario de Japón, e instalado en Oaxaca desde hace muchos años, explora también en las culturas indígenas de Oaxaca, especialmente en las de las costas.

En un terreno más contemporáneo, Francisco Toledo (1940), fundador del IAGO, posee un estilo semi-abstracto, basado en las realidades de México; las estampas que aquí se exhiben se centran en el terremoto que golpeó a Juchitán en 2017.

Los grabados de Alejandro Santiago (1964-2013) incluyen figuras vibrantes y expresionistas; Sergio Hernández crea un mundo circense con líneas y formas vivaces. En las imágenes de Guillermo Olguín (1969) se sugiere una conexión con los sueños y el inconsciente.

Demián Flores combina desde la línea post-moderna, la cultura popular con la ingeniería prehispánica, con lo que genera una crítica a la sociedad mexicana.

Tendencias en el arte oaxaqueño como la abstracción, están presentes en la obra semi-abstracta del artista Rodolfo Nieto (1936-1984), así como de Rubén Leyva (1953), en cuya creación hay composiciones juguetonas y animadas.

José Villalobos (1950) trabaja por su parte con las posibilidades gestuales de la línea y la forma, al igual que Raúl Soruco (1952), cuyas estampas vibran con colores saturados.

La curadora de Maestros oaxaqueños. Celebrando 30 años del IAGO, Deborah Caplow, señala que existe gran apertura de diálogo y convivencia entre los grandes maestros oaxaqueños (aún vivos) y las nuevas generaciones. “Es una especie de retroalimentación entre experiencia y juventud, incluso intercambian conocimiento con los talleres gráficos, pues casi todos se conocen.”

Esta muestra, inscrita en el contexto histórico de las artes gráficas de Oaxaca que celebran los 30 años del IAGO, también comprende la exposición El arte gráfico contemporáneo en Oaxaca que permanecerá hasta el 14 de julio.

El Museo Nacional de la Estampa expone Maestros oaxaqueños. Celebrando 30 años del IAGO en Av. Hidalgo núm. 39, Plaza de la Santa Veracruz, Centro Histórico, Alcaldía Cuauhtémoc, Ciudad de México. (Boletín)