"Brasil no estimula ni entrará en ninguna guerra comercial" dijo a periodistas el ministro de Relaciones Institucionales, Alexandre Padilha, luego de un evento en compañía del presidente Luiz Inácio Lula da Silva.
El gigante latinoamericano es el segundo abastecedor de acero a Estados Unidos.
"El presidente Lula ha dicho siempre con mucha claridad: las guerras comerciales no le hacen bien a nadie", enfatizó Padilha.
El lunes el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, determinó la adopción de aranceles del 25% a las importaciones de acero y aluminio, que entrarán en vigor el 12 de marzo, "sin excepciones ni exenciones".
Esos aranceles afectarán con fuerza a Brasil, solo superado por Canadá como proveedor de acero para la mayor potencia económica del mundo.