Santiago, Chile.- (La Jornada) La justicia chilena solicitará que el papa Francisco declare en un proceso por abusos sexuales cometidos por un sacerdote, que en determinado momento recaudó fondos para una policía secreta de la dictadura.El magistrado Juan Manuel Muñoz aceptó la solicitud de la defensa de las tres víctimas del cura Fernando Karadima para que Jorge Mario Bergoglio sea interrogado mediante un exhorto en la demanda contra el Arzobispado de Santiago, acusado de encubrir los abusos sexuales.
La solicitud se basó en que el Papa argentino defendió al obispo de Osorno Juan Barros, contra quien pesan acusaciones de encubrir los abusos del ex párroco del elegante templo del sector de El Bosque, Karadima.
De esta manera, el magistrado Juan Hermosilla deberá redactar el exhorto que luego será enviado a la Corte Suprema, a cargo de remitirlo al ministerio de Relaciones Exteriores para que lo traspase al Vaticano.
La diligencia será parte de un listado de personas que fueron requeridas para deponer sobre los puntos de prueba fijados por el el juez Muñoz.
La demanda fue presentada por James Hamilton, Juan Carlos Cruz y José Andrés Murillo y busca una indemnización por perjuicios de 450 millones de pesos chilenos.
Se argumentó que la jerarquía católica cometió negligencias sistemáticas al momento de abordar las denuncias de agresiones sexuales en contra de religiosos, y específicamente de Karadima, condenado por el Vaticano a una vida de penitencia y oración.
