1060824414.jpg 1718483346TeleSur.- Ramón Gordils, viceministro venezolano de Cooperación Económica, ha reconocido que aún deben superar las barreras de la distancia por poder colocar productos venezolanos en el mercado ruso.

Ramón Gordils, viceministro venezolano de Cooperación Económica y presidente del Banco de Comercio Exterior (Bancoex), ha expresado que Venezuela tiene en la mira a Rusia en su búsqueda para aumentar sus exportaciones.

“Venezuela está haciendo ahora mismo un esfuerzo por multiplicar su desempeño de exportador y Rusia es un muy apetitoso destino para nuestras exportaciones”, afirmó Gordils durante el Foro Económico de San Petersburgo (SPIEF).

El viceministro reconoció que era el momento perfecto para aprovechar la eventualidad que sufren algunos proveedores de Rusia y con ello la oportunidad de mercado propiciada por el embargo agroalimentario que la Unión Europea le ha impuesto al país euroasiático. No obstante, el viceministro recalcó que pese a esta coyuntura que vive Rusia aún no se ha logrado “cuajar un volumen de negocio suficiente y es en eso en lo que estamos trabajando”.

Al respecto, el viceministro argumentó que la razón se debe a “dificultades históricas” que condicionan las relaciones bilaterales, puesto que existe poca costumbre a relacionarse económica, financiera y políticamente con países a grandes distancias.

Pero Gordils no se desanima y ha subrayado cómo Venezuela ha avanzando, por ejemplo, en la exportación del granito para construcción, y como ahora, en lugar de vender el material en bruto, lo procesan y lo pulen. Esto le ha permitido al país suramericano no solo casi duplicar las ganancias, sino también alcanzar mayor visibilidad del producto, lo que incluso los ha posicionado en ferias comerciales en Rusia.

“Seguimos trabajando en mejorar nuestro negocio en 'commodities' y productos agrícolas, un asunto cuya complicación principal es de carácter logístico, acceder en tiempo y en costo a esta distancia”, explicó el viceministro venezolano, quien además agregó que otra dificultad que no solo enfrenta Venezuela, sino toda la región, es poder “atender la escala de la economía rusa”.