Macri es el primer presidente latinoamericano que se reunirá con Temer, quien asumió después de que la ex presidenta Dilma Rousseff fuera destituida en un cuestionado proceso.
Pese a que algunos sectores de Brasil y de la comunidad internacional consideraron que Brasil había sufrido un golpe institucional, el gobierno de Macri se apuró a respaldar a Temer desde el primer momento.
En mayo pasado, apenas unos minutos después de la suspensión del Dilma Rousseff y de la asunción provisional de Temer, la cancillería argentina emitió un comunicado en el que reconoció la legalidad del proceso.
Lo mismo ocurrió a fines de agosto después de que el Senado brasileño confirmara la destitución de la ex mandataria.
El gobierno macrista legitimó así a Temer, a quien Macri recibirá en una audiencia privada el próximo lunes para después ofrecerle un almuerzo de honor junto con el resto de los funcionarios brasileños que viajarán a Buenos Aires.