18432155 xlHispan TV.- Miles de chilenos han salido este domingo a las calles para rechazar el actual sistema de jubilación con ahorros manejados por empresas privadas.

Los manifestantes han marchado por el centro de Santiago (capital) con la finalidad de repudiar este sistema controlado por las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP), empresas privadas que son el blanco de las críticas por las modestas pensiones que pagan, en contraste con las suculentas ganancias que obtienen.

“Creemos que esto puede hacer el cambio, no queremos más AFP porque nos han engañado, porque nos han dado pensiones miserables”, ha afirmado Jimena Morales, una de las participantes en la marcha.

La protesta ha sido convocada por el movimiento ‘No+AFP’, pero una intermitente lluvia primaveral y un intenso frío han mermerado la marcha, cuyos organizadores esperaban alcanzar cifras cercanas al millón de personas a nivel nacional, tal como ocurrió en las dos anteriores manifestaciones.

La marcha, en la que han participado unos 75.000 chilenos según los organizadores de la protesta, y 15.000 de acuerdo a la Policía, ha concluido sin incidentes y se ha desarrollado bajo una estricta vigilancia policial.

Chilenos se manifiestan contra el sistema de jubilación en Santiago (capital), 16 de octubre de 2016.

El sistema de pensiones fue creado en 1981 bajo la dictadura de Augusto Pinochet, mediante el cual las AFP administran los fondos de pensiones de unos 10 millones de chilenos, que superan los 170.000 millones de dólares, que son invertidos en acciones o renta fija y cuyas pérdidas son asumidas por los cotizantes.

Los trabajadores aportan el 10 % de su salario mensual a su fondo de jubilación. Los manifestantes critican el sistema, porque cuando comenzó las AFP prometieron que pagarían una pensión equivalente al 70 % del último salario, pero en la actualidad pagan un promedio de unos 400 dólares por mes, por debajo del salario mínimo chileno (unos 420 dólares).

A esto se suma que el fondo de jubilación es individual y no recibe aportes del empleador ni del Estado. Anteriormente, los ahorros eran manejados por entidades públicas.