En un comunicado, señaló que observa con cuidado y preocupación los eventos recientes en la nación sudamericana, que terminaron con la destitución del presidente Fernando Lugo.
Dijo que toma nota de la preocupación de los líderes regionales con respecto al juicio político a Lugo y sus implicaciones para la democracia en Paraguay.
Asimismo, el funcionario reconoció los esfuerzos de la región por buscar una solución, en especial los de la Organización de Estados Americanos (OEA) y los de la Unión de Naciones Sudamericanas (UNASUR).
El 22 de junio, el Congreso de Paraguay destituyó al presidente Fernando Lugo por su presunta responsabilidad en un desalojo de campesinos que causó la muerte de 17 personas.