“En estos años, los cambios en las circunstancias sociales, políticas y económicas, tanto a nivel global como dentro de nuestros países, han producido cuestionamientos sobre los mecanismos multilaterales contemporáneos, incluido el G20”, reconoció Macri.

Frente a los líderes que integran este bloque político y económico, el presidente advirtió sobre las tensiones generadas por las distintas visiones para encarar individualmente las oportunidades y los desafíos globales.

“Por esta razón, y si bien la agenda que hoy nos convoca es distinta, quiero pedirles que actuemos con el mismo sentido de urgencia que en 2008”, advirtió frente a los presidentes de Estados Unidos, Donald Trump; China, Xi Jinping; Rusia, Vladimir Putin; y Francia, Emmanuel Macron, entre otros.

Macri agregó que, “en un mundo diverso y con multiplicidad de protagonistas, con su propia historia y cultura, la esencia del G20 es promover un diálogo que respete las diferencias e impulse acciones basadas en intereses compartidos”.

También celebró que en este tipo de encuentros “los líderes nos vemos cara a cara, hablamos con franqueza y ratificamos coincidencias a la misma vez que administramos desacuerdos. Es algo que viene sucediendo cada año desde hace una década”.

Con un asumido optimismo, el mandatario reveló que esperaba que entre hoy y mañana el G20 genere consensos para los próximos 10 años porque es una tarea prioritaria que todos deben tener por delante.

Sin embargo, reconoció que los consensos “no se construyen de la noche a la mañana, es un proceso con avances y retrocesos, que continúa después de este G20 y resulta mejor cuando nuestros compromisos se plasman en acciones concretas que mejoran el bienestar de nuestra gente”.

El presidente recordó que la agenda incluye, bajo la consigna de construir consenso para un desarrollo equitativo y sostenible, temas como el futuro del trabajo, la infraestructura para el desarrollo, un futuro alimentario sostenible, la estabilidad financiera, la sustentabilidad climática y el comercio internacional.

Por otra parte, explicó que la cumbre es un hecho inédito en Argentina, en donde nunca convergieron tantos líderes mundiales y al mismo tiempo.

“Lo tomamos como un gesto de apoyo y de reconocimiento a la presencia y al desempeño que está teniendo la Argentina en el escenario global, sobre todo después de tantos años de aislamiento”, dijo.

Después de inaugurar el cónclave, los líderes realizaron una sesión plenaria a puertas cerradas que continuará mañana, y después de la cual Macri dará a conocer la declaración final del encuentro.

El Grupo de los 20 nació en 1999 con la participación de ministros de Finanzas y presidentes de bancos centrales, pero a partir de la crisis financiera internacional de 2008 se transformó en un bloque de jefes y jefas de Estado.

Actualmente está integrado por la Unión Europea y 19 países: Alemania, Arabia Saudita, Argentina, Australia, Brasil, Canadá, China, Corea del Sur, Estados Unidos, Francia, India, Indonesia, Italia, Japón, México, Reino Unido, Rusia, Sudáfrica y Turquía.

Estos países representan el 85 por ciento del producto interno bruto global, el 66 por ciento de la población mundial, el 75 por ciento del comercio internacional y el 80 por ciento de las inversiones.

En su décima edición, la Cumbre del G20 se realiza por primera vez en Sudamérica, por lo que Argentina, en su calidad de país anfitrión, invitó a Chile, Países Bajos y Jamaica.