Queremos ayudar a Grecia a enfrentar el aumento de los flujos migratorios de estos últimos meses", recibiendo a "400 personas que llegaron a territorio griego", declaró el embajador Patrick Maisonnave. Grecia se convirtió en 2019 en la primera puerta de entrada de migrantes a Europa.
El gobierno griego conservador de Kyriakos Mitsotakis anunció en noviembre el cierre de los tres campamentos más superpoblados e insalubres y su sustitución por centros cerrados, para triplicar la capacidad de acogida en las islas de Lesbos, Samos y Quíos.
También prometió la devolución a Turquía de 10 mil personas cuya solicitud de asilo fue denegada y el traslado de 20 mil solicitantes de asilo al territorio continental griego.