Las autoridades de Moshi, conocido por su cercanía con el parque nacional del Kilimanjaro, en el norte del oriental país africano, confirmaron este domingo que la estampida que dejó 21 muertos es una de las cinco peores en los pasados cinco años en el continente.

El día de ayer el autollamado "apóstol" Boniface Mwamposa derramó lo que denominó "aceite santo" en el piso del lugar donde celebraba un oficio y la multitud que asistía se arrojó en pos de una gota para curar sus males o alcanzar fortuna, lo que generó el tumulto mortal.

Los registros señalan que la estampida que ha dejado más fallecidos en África es la que ocurrió en 2013 en Nigeria con saldo de 28 muertos, también en un acto religioso, recordó la edición de The Citizen.

En 2014 los decesos sumaron 11 en Zimbabwe en otro servicio religioso, mientras que en Lusaka, capital de Zambia, perecieron ocho personas que buscaban recibir alimentos tras un oficio religioso, y en Sudáfrica, en 2018, tres mujeres murieron en una estampida en otra ceremonia religiosa.

En tanto, la sureste región de Lindi ha sumado 21 decesos por las inundaciones creadas por el desborde de ríos locales, tras una semana de intensas lluvias, que también han aislado a unas 500 personas.