La participación privada ha estado ausente en el acuerdo de abril para apoyar a las naciones pobres muy afectadas por la crisis de Covid-19, lo que ha limitado los posibles beneficios.
Los ministros de finanzas de Alemania, Canadá, Francia, Japón, Italia, Reino Unido y Estados Unidos anunciaron que mantendrán esta iniciativa de suspensión de deuda para esas naciones.