Rusia niega que quiera cambiar al gobierno de Ucrania

Milenio.- La cancillería rusa rechazó el domingo la afirmación británica de que Rusia quiere reemplazar al gobierno de Ucrania por otro afín a Moscú, y que se estaba considerando al ex parlamentario ucraniano Yevheniy Murayev como posible candidato.

 

La Oficina de Exteriores de Gran Bretaña también mencionó el sábado a varios políticos ucranianos que según dijo tenían lazos con los servicios rusos de inteligencia, junto con Murayev, que lidera un pequeño partido prorruso sin representación parlamentaria. Esos políticos incluyen a Mykola Azarov, quien fue primer ministro con Viktor Yanukovych, el presidente ucraniano derrocado en un levantamiento de 2014, y el ex jefe de gabinete de Yanukovych, Andriy Kluyev. "Algunos de estos tienen contacto con oficiales de inteligencia rusos que actualmente están involucrados en la planificación de un ataque contra Ucrania", dijo la oficina británica. Murayev dijo a The Associated Press a través de Skype que la afirmación británica "parece ridícula y graciosa", y que se le ha negado la entrada a Rusia desde 2018 por ser considerado una amenaza para la seguridad rusa. Dijo que la sanción se impuso a raíz de un conflicto con Viktor Medvedchuk, el político prorruso más destacado de Ucrania y amigo del presidente ruso Vladimir Putin. El partido Nashi de Murayev —que se llama igual que el antiguo movimiento juvenil ruso que apoyó a Putin— es considerado simpatizante de Rusia, pero Murayev lo rechazó el domingo. "El tiempo de los políticos pro-occidentales y pro-rusos en Ucrania se ha ido para siempre", dijo en una publicación de Facebook. "Todo lo que no apoye el camino de desarrollo pro-occidental de Ucrania es automáticamente prorruso", dijo Murayev a la AP. El gobierno británico dijo que sus afirmaciones se basaban en información de inteligencia y no presentó pruebas para respaldarlas. Las tensiones entre Moscú y Occidente en torno a los planes rusos para Ucrania han subido en las últimas semanas. "La desinformación difundida por la Oficina de Exteriores británica es una prueba más de que son los países de la OTAN, liderados por los anglosajones, los que están subiendo la tensión en torno a Ucrania", indicó el domingo la vocera del Ministerio de Exteriores de Rusia Maria Zakharova en la plataforma de mensajes Telegram. "Pedimos a la Oficina de Exteriores británica que detenga la actividad provocadora, deje de difundir tonterías". La secretaria británica de Exteriores, Liz Truss, dijo que la información "arroja luz sobre el alcance de la actividad rusa diseñada para socavar a Ucrania, y es un indicador de las deliberaciones del Kremlin". Truss instó a Rusia a "desescalar, poner fin a sus campañas de agresión y desinformación y seguir una vía diplomática", y reiteró la postura británica de que "cualquier incursión rusa en Ucrania sería un enorme error estratégico con graves costes". Gran Bretaña ha enviado armas antitanque a Ucrania dentro de los esfuerzos por redoblar sus defensas ante un posible ataque ruso. En medio de los esfuerzos diplomáticos para desactivar la crisis, estaba previsto que el secretario británico de Defensa, Ben Wallace, se reuniera en Moscú con el ministro ruso de Defensa, Sergei Shoigu. No se había fijado una fecha para el encuentro, que sería el primer diálogo bilateral de defensa entre Moscú y Londres desde 2013. Estados Unidos ha emprendido una agresiva campaña en los últimos meses para unificar a sus aliados europeos contra una nueva invasión rusa en Ucrania. La Casa Blanca describió las acusaciones del gobierno británico como "muy preocupantes" y expresó su apoyo al gobierno electo de Ucrania. El domingo, el secretario de Estado, Antony Blinken, dijo que no podía comentar específicamente sobre el reclamo británico, pero "hemos estado advirtiendo sobre este tipo de táctica durante semanas... Esto es una parte muy importante del conjunto de herramientas ruso". "Abarca toda la gama desde una gran incursión o invasión convencional de Ucrania hasta este tipo de actividades desestabilizadoras en un intento de derrocar al gobierno. Y es importante que la gente esté al tanto de eso", dijo Blinken en entrevista en CNN. Mientras, el presidente Joe Biden pasó el sábado en la finca presidencial de Camp David, a las afueras de Washington, reunido con su equipo de seguridad nacional para tratar la situación en Ucrania.