Sin embargo, indicó que se respetarán los contratos ya existentes “porque si empezamos a cancelar contratos de manera indiscriminada se va a generar desconfianza en el país, y ahora los inversionistas y tienen mucha confianza en México porque ya hay un Estado de derecho, saben los inversionistas que no se permite la corrupción”.
Tras aseverar que el consejo de la empresa brasileña llegó a sesionar, incluso, en Los Pinos, “o sea que se metieron hasta la cocina”, el mandatario federal subyaró que las empresas corruptas del extranjero no podrán participar ya en licitaciones del gobierno, “eso se acaba”, enfatizó.