merkelAFP y DPA.- La canciller alemana, Angela Merkel, abucheada por extremistas, prometió ayer luchar sin “tolerancia” contra los actos xenófobos en plena crisis migratoria europea, en tanto fueron encontrados 40 cadáveres en un barco de indocumentados en el Mediterráneo.

Por su parte, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, invitó en París a “los países de Europa y otras partes a demostrar compasión y hacer mucho más para resolver la crisis” migratoria.

El ministro del Interior francés, Bernard Cazeneuve, y el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados, Antonio Guterres, llamaron en esta jornada a crear centros de acogida y para diferenciar a los refugiados de los migrantes económicos.

Durante su visita al centro de acogida de Heidenau, Merkel denunció la violencia “abyecta” y “vergonzante” entre policía y extremistas durante el pasado fin de semana.

La canciller aseguró que no habrá “ninguna tolerancia” con las agresiones de la extrema derecha. “Hay que decirlo claramente: no habrá ninguna tolerancia para quienes cuestionan la dignidad de otras personas”, dijo.

Merkel fue abucheada por unas 200 personas que corearon consignas como “¡traidora!” o “somos la jauría”, en alusión al término usado por el gobierno para denunciar los actos xenófobos de la extrema derecha.

Esa ola de xenofobia de grupos de extrema derecha se produce en momentos en que no cesa el flujo migratorio hacia Europa.

En esta misma jornada, frente a las costas libias, 40 cadáveres fueron hallados en la bodega de una embarcación con más de 430 migrantes que se dirigía hacia Italia por el Mediterráneo, informó la guardia costera sueca que realizó el rescate.

PIDEN QUE EL EJÉRCITO CONTENGA A LOS MIGRANTES EN HUNGRÍA
El partido en el poder en Hungría presentará ante el Parlamento una propuesta para que el ejército ayude a contener el flujo de migrantes procedentes de Serbia, anunció ayer un dirigente de esa formación.

El gobierno quiere que “sea posible utilizar al ejército en tareas relacionadas con la defensa de fronteras y la migración”, afirmó Szilard Nemeth del gobernante partido Fidesz, que encabeza la comisión parlamentaria de Seguridad Nacional.

“Los migrantes ilegales se están haciendo cada vez más agresivos, no podemos tolerar lo que ocurrió en Roszke, no podemos aceptar esta agresión”, añadió.

El jefe de la policía de Budapest, Karoly Papp, anunció que más de 2,100 agentes serán enviados a la frontera de Hungría con Serbia. “La protección de la frontera se reforzará con dos mil 106 policías suplementarios a partir del 5 de septiembre”, dijo.