¿Qué queremos? ¡Paz! ¿Qué necesitamos? ¡Paz!", cantaron unos cuantos cientos de migrantes fuera de la estación Keleti, el nuevo punto caliente de la crisis migratoria que está generando tensiones en todo el continente europeo.

Un flujo incesante de personas procedentes de Oriente Próximo, Asia y África llegan a Europa huyendo de la guerra, las persecuciones y la pobreza.

La policía húngara dijo en un comunicado que tiene previsto reforzar sus posiciones en el exterior de Keleti ante el aumento constante del número de migrantes que llegan a la zona procedentes de Serbia.

Se estima que 3 mil están ya acampados en las inmediaciones del edificio. Los agentes trabajan en colaboración con los servicios de Austria, Alemania y Eslovaquia para detectar a migrantes que viajan de forma ilegal en otros trenes húngaros, explicando que esta iniciativa es compatible con el principio de libre circulación de la Unión Europea, que permite viajar entre los países miembro son pasaporte.

Los esfuerzos para controlar, proteger y limitar los movimientos de los migrantes siguieron sin descanso el miércoles en otros puntos del continente.

BLOQUEOS EN EL EUROTÚNEL
Autoridades francesas dijeron que el servicio de trenes que conecta el continente con Gran Bretaña a través del canal de la Mancha recuperó la normalidad el miércoles tras importantes interrupciones nocturnas provocadas por reportes de migrantes corriendo por las vías e intentando subir a lo alto de los convoyes.

Pasajeros a bordo de uno de los trenes que une París con Londres dijeron que su viaje se suspendió porque migrantes intentaron subir a él dañando el equipo antiincendios.

En mensajes publicados en Twitter, pasajeros dijeron ver a migrantes corriendo sobre el techo de otro convoy cerca del puerto francés de Calais, otra localidad con una fuerte presencia de refugiados.

FLUJO INTERMINABLE
Está previsto que el primer ministro húngaro, Viktor Orban, se reúna el jueves con líderes de la Unión Europea para discutir la forma en que Budapest gestiona un flujo migratorio sin precedentes.

En lo que va de año, el país ha recibido a más de 150 mil personas, en su mayoría de Siria y otras zonas en conflicto. Mientras Alemania dijo que espera recibir 800 mil refugiados este año -cuatro veces más que en 2014- muchos miembros de la UE están siendo criticados por no comprometerse a acoger a más solicitantes de asilo.

En Islandia, que no forma parte del bloque político y económico, un movimiento popular está desafiando la iniciativa gubernamental de acoger a solo 50 sirios.

El recién formado grupo de presión "Syria's Calling" ("Siria Llama") dijo que miles de residentes en la isla se ofrecieron en internet en las últimas 48 horas para abrir sus casas a los refugiados de guerra. Otros pidieron al país que abra un centro para migrantes en una base militar en desuso.

Buques de la Marina de varios países siguen patrullando aguas del Mediterráneo ante la costa de Libia con la esperanza de evitar nuevos naufragios masivos. Un barco noruego dijo que estaba trasladando a unos 800 migrantes, incluyendo 11 mujeres embarazadas y 30 niños a Cagliari, en la isla italiana de Cerdeña.

MUEREN 11 INMIGRANTES AHOGADOS
Medios turcos informaron de la muerte de al menos 11 migrantes y la desaparición de otros cinco tras el naufragio de los barcos en los que viajaban ante la costa de la isla griega de Kos.

La agencia de noticias privada Dogan informó de que un bote con 16 personas a bordo se hundió en aguas internacionales tras zarpar de la localidad turística turca de Bodrum a primera hora del miércoles.

Siete de los pasajeros se ahogaron y cuatro fueron rescatados. Horas más tarde, una segunda embarcación con seis migrantes se hundió ante la costa de Bodrum, y una mujer y tres niños se ahogaron, apuntó.

La guardia costera griega dijo que una operación nocturna con dos barcos y un helicóptero logró rescatar a tres desaparecidos en el mar que fueron recogidos por un barco de pesca.