La planta de Fessenheim, en funcionamiento desde 1977, ha provocado numerosas manifestaciones y huelgas de hambre de opositores. En 2011 el presidente François Hollande prometió cerrarla.
El reactor número uno de la planta parará a las 2H30 (1H30 GMT) del sábado y el número dos, el 30 de junio. Estas fechas constituirán una "primera etapa en la estrategia energética de Francia", afirmó en un comunicado la oficina del primer ministro Edouard Philippe.
La parada gradual del reactor de agua a presión de 900 megavatios comenzará el viernes por la noche. La evacuación del combustible usado se llevará a cabo antes del verano de 2023. El desmantelamiento propiamente dicho durará hasta 2040, como muy pronto.